Breve historia de las Catacumbas de Domitilla
Principios del siglo II d.C.: Se inicia la construcción de las dependencias de Flavia Domitilla, lo que pone de relieve la conexión entre las primeras comunidades cristianas y las influyentes familias romanas.
Las catacumbas se expanden a lo largo de los siglos, presentando elaborados frescos e inscripciones que revelan la fe y el arte de la época. Se convierten en un lugar importante para los primeros rituales cristianos, incluidos entierros y conmemoraciones.
Siglo IV d.C.: El papa Dámaso encarga una basílica semisubterránea dedicada a los santos Nereo y Aquileo, martirizados bajo el emperador Diocleciano.
1593: Redescubierto por el arqueólogo Antonio Bosio, conocido como el "Colón de las Catacumbas". Sin embargo, vuelven a abandonarse con el paso de los años como una simple peculiaridad morbosa de la ciudad antigua.
1873: Redescubierta de nuevo por Giovanni Batista de Rossi. En esta ocasión, comienzan las obras de restauración de las pinturas y de la basílica subterránea.
Hoy son un recuerdo conmovedor de la rica historia espiritual de la ciudad y de su mundo subterráneo.
Explicación de la historia de las catacumbas romanas