Con más de 2000 años de historia a sus espaldas, el Coliseo no es una estructura cualquiera. Aunque los efectos del tiempo y el clima han dejado su huella en el monumento, su grandeza sigue intacta. Varias de sus características principales siguen en pie, como la arena (un suelo de madera cubierto de arena) y el subsuelo, un laberinto de túneles e intrincados sistemas de palancas.
Aquí tienes dos mapas que puedes utilizar para entrar en el monumento y navegar por sus entrañas.